domingo. 12.05.2024
Sociedad

Un cumpleaños muy especial, y van 800, para la Catedral de Burgos

La ciudad de Burgos ha vivido estos días inmersa en un amplio programa de actos con motivo del octavo centenario de la Catedral, momento histórico que se ha tenido que compaginar con el tiempo de la pandemia por la covid-19.

El martes 20, en una jornada de intenso calor, se vivieron los actos centrales de la histórica conmemoración. El día arrancó con un repique de campanas, continuó con un pasacalles con 120 dulzaineros, entre los que se encontraban representantes de la zona de Tolbaños con Diego Serrano entre ellos, la ceremonia religiosa oficiada por el Arzobispo, Mario Iceta, y una concentración simbólica de homenaje a la Catedral frente al templo, que contó con la participación de representantes de distintos colectivos, asociaciones, federaciones y agrupaciones de la ciudad burgalesa.

No faltaron los bailes, los de los gigantillos y gigantones, y los de los grupos de danzas, entre quienes se encontraba Jesús Lope, de Huerta de Rey. Se interpretó, con la música de la Banda de la División San Marcial, y las privilegiadas voces de las integrantes del coro, el Himno a Burgos.

En esa mañana, se pudo apreciar el paso de la ‘Patrulla Aguila’, surcando con los aviones el ‘Cielo de la Catedral’.  Ya por la tarde, el templo acogerá un concierto de la Orquesta de Radio Televisión Española, antes de cerrar la jornada con el concierto de Rozalén,y otra sesión de fuegos artificiales.

El programa de actos arrancó el lunes 19 de julio con el canto de vísperas en la Catedral por los monjes benedictinos de la Abadía de Santo Domingo de Silos y el primer espectáculo de fuegos artificiales. Pablo López actuó en el Coliseum, y, ya por la noche, se pudo apreciar la iluminación especial del templo, y disfrutar de la primera colección de fuegos artificiales.

En la jornada del miércoles 21 de julio actuaron en la Catedral los ‘Niños cantores de Viena’ y, el Ayuntamiento de Burgos canceló el acto en el que 400 niños con velas en ambas manos se iban a concentrar en la plaza de Santa María, frente al templo, para cantar el ‘Cumpleaños feliz’, antes de repartir raciones de tarta entre los que se acerquen al lugar. Desde el Consistorio se consideró que no se debía de desarrollar este acto ante la evolución de la pandemia de covid-19.

 

Un cumpleaños muy especial, y van 800, para la Catedral de Burgos