miércoles. 24.04.2024
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María José Santamaría y Esther Pellitero son dos jóvenes emprendedoras de Quintanar de la Sierra  que hace cuatro años decidieron apostar por su tierra y formar ‘Demanda Natural’, una pequeña empresa dedicada a realizar actividades recreativas en la naturaleza. Ahora, sin perder la esencia que les hizo llegar hasta aquí, han puesto en marcha otra nueva línea de negocio combinando el arte y el entorno natural. O lo que es lo mismo, uniendo la creatividad con los recursos naturales que la comarca pinariega ofrece. De ahí nació ‘Demanda Natural ART’, desde donde estas dos pinariegas realizan productos únicos que no pasan desapercibidos a los ojos de nadie.

“La artesanía es un trabajo que a pesar de dedicarle horas y horas, es muy gratificante”, señalan María José Santamaría y Esther Pellitero. “Al final realizas piezas únicas, una a una hechas a mano y en nuestro caso, utilizando un material que llevamos muy en vena. La madera nos ha rodeado siempre y aunque sea una estampa habitual para nosotros, todo aquello verde que vemos alrededor tiene un cómo, un cuándo y un por qué. Transmitirlo se ha convertido en nuestra forma de vida y en un valor añadido al ciclo vital que tiene”, señalan las empresarias.

Todo comenzó con la realización de un llavero en rodaja de madera con la imagen de San Cristóbal. “Se lo presentamos a la Asociación de Conductores y Camioneros de Quintanar para los detalles que cada año regalan en las fiestas patronales. A partir de ahí, empezamos a tener encargos con diferentes diseños que personalizábamos a gusto del cliente y hemos ido integrando poco a poco más artículos siempre con la misma base: madera y trabajo personalizado. Ahora, a parte de los llaveros, también hacemos imanes, cajas de regalo para nacimientos y/o bautizos, porta alianzas en rodaja, porta velas y lo que más reclamo está teniendo, la fotografía en madera. Una técnica que utilizamos a base de mucha paciencia, haciendo que la imagen se impregne por el poro y quede visible la veta. Es uno de los artículos que más gustan y casi el más original a la hora de regalar”, confiesan.

De este modo, las quintanaras Santamaría y Pellitero combinan sus dos líneas de negocio sin olvidar que principalmente la empresa nació con un enfoque turístico con la que realizan rutas guiadas con explicaciones de selvicultura, bio-rutas, talleres pedagógicos, etc. “Un sector en el que creemos y estamos convencidas de que debemos darle la importancia que merece. Podría ser una fuente de riqueza emocional, profesional y económica para toda la comarca. No tenemos nada que envidiar a otros destinos que son mucho más solicitados. Contamos con un impresionante paisaje, mucha historia, buena gastronomía y somos gente trabajadora. Personalmente, creemos que falta seriedad, acuerdos entre los empresarios del sector, grupos de acción local, las instituciones y un trabajo en conjunto que vaya en la misma dirección. Por nuestra parte, actualmente estamos inmersas en la última fase de un proyecto para fomentar el turismo y que estamos convencidas de que será beneficioso para todos”, concluyen.

Creatividad y madera se unen para el arte